Los tamaños de las botellas de vino
La botella más habitual que nos podemos
encontrar es la que contiene 75 cl. de vino. Acerca de porqué ha sido ese el
tamaño “estándar” y no otro existen diversas teorías:
La primera de ellas hace referencia a
que era la cantidad ideal para consumir en una comida por una familia de forma
moderada.
Otra se basa en que la capacidad
pulmonar del elaborador le permitía hacerla de ese tamaño.
La siguiente hace referencia a motivos
de comercio, ya que es la medida más cercana a 1/5 de galón, medida inglesa.
Nombres y tamaños de
botellas de vino
Os dejamos el listado de botellas en
función de su capacidad de menor a mayor:
Piccolo o Benjamín: El volumen habitual es de 18,7 a 20 cl
que sería un cuarto de botella. Ésta es la botella que se utiliza en los
aviones, en hoteles para los botellines de cava, en los trenes, etc.
Chopine: La botella de 25 cl que en vino es muy
rara, pero que ha sabido sobrevivir gracias al aceite y la cerveza. Chopine es
una medida del mundo del vino francés que equivale 0,465 litros.
Demi o Media Botella: Tiene el volumen de la mitad de las
botellas convencionales, se usan mucho en restaurantes y en España ha aumentado
su utilización por la restricción del alcohol al volante y por los regalos de
bodas, bautizos y otros eventos, como en las ferias andaluzas para el fino y la
manzanilla. Demi es “mitad” en francés.
Jennie: Es una botella de medio litro de
capacidad, es muy utilizada para vinos dulces y generosos, y se está usando
mucho para regalos de boda. Jennie es el nombre que tiene el aguardiente en
Gales.
Estándar: Es la botella que más utilizamos con
un volumen de 0,75 cl es la botella que suele estar en tiendas y restaurantes.
Mágnum: Es el nombre que se usa para designar
a la botella doble, es decir en un mágnum entrarían dos botellas estándar, por
lo que su volumen es de 1,5 litros. Esta botella es ideal para comidas de 4
personas o más, y normalmente los vinos evolucionan mucho mejor en esta botella
que en las estándares.
Marie Jeanne: Con este nombre se reconoce a la
botella de 2,25 litros que tiene capacidad para 3 botellas de vino
convencionales, se usaba de manera muy puntual para el embotellado de Coñac y
otros destilados.
Doble Magnum: Esta botella, tiene la capacidad de
dos magnum y por tanto 4 botellas convencionales y su capacidad es de 3 litros.
Jeroboam o Rehoboam: Es un tamaño que empieza a impresionar
con sus 4,5 litros de capacidad. A partir de esta botella empezaremos a
nombrarlas con nombre de personajes bíblicos, y su utilización real es muy
limitada, siendo más botellas de museo o exposición que auténticas unidades de
consumo. El nombre de esta botella le viene del primer rey y fundador de
Israel.
Franzia o Box: De 5 litros de capacidad y que debe su
nombre a un grupo enológico francés que la creó para obsequios a sus clientes.
Matusalén o Imperial: Esta botella de 6 litros de capacidad.
Matusalén fue el hombre más viejo del mundo según la biblia.
Salmanazar o Mordechai: Esta botella tiene una capacidad de 9
litros y equivale a 12 botellas convencionales. Salmanazar fue un rey asirio
según la biblia y Mordechai era el tío de Ester Reina de Persia.
Baltasar o Balthazar: Con 12 litros de capacidad, esta
inmensa botella recibe su nombre de uno de los reyes magos de oriente.
Nabuchonodozor o
Nebuchadnezzar: El volumen de esta botella es de 15 litros y recibe su nombre del Rey de
la Bíblica Babilonia.
Melchior o Melchor: Esta imponente botella de 18 litros,
necesita un mecanismo para poder ser servida, su nombre lo recibe de otro de
los reyes magos.
Melchizedek: Melchizedek era rey de Jerusalén y
sacerdote del alto Dios y en algunos escritos se le considera el hijo de Noé.
40 litros de capacidad.
La botella de vino es algo más que el
envase que lo contiene: es uno de los medios para que el vino evolucione y
alcance su momento óptimo de consumo.
En cuanto al tamaño, es importante saber
que éste influye de manera considerable en el envejecimiento y conservación del
vino: la evolución es más lenta a medida que aumenta el tamaño de la botella.